Son perfectas para cerramientos de terrazas o balcones. Posee un sistema de deslizamiento suave y silencioso. Permiten el aprovechamiento óptimo del espacio porque no ocupan mucho sitio.
Su sistema es parecido al cerramiento que se utilizan en las ventanas practicables pero con la funcionalidad de las correderas. Siempre suele haber una hoja que se desliza frente a otra que se queda fija.
Son muy resistentes y garantizan un buen aislamiento del hogar tanto acústico como térmico con lo que ahorraremos energía.